El policía que abatió a los dos jóvenes que lo habrían asaltado y mató accidentalmente a un atleta de 21 años que hacía ejercicios en la zona, seguirá aprehendido por el momento. Dos de los fallecidos portaban un arma de juguete.
El oficial auxiliar Facundo Lencina (24 años) estaba sentado en su moto esperando que su novia saliera de la peluquería donde trabaja. Fue abordado por dos motochorros que le quitaron sus pertenencias. Cuando se marchaban, la víctima del supuesto robo, sacó su arma reglamentaria, se identificó como policía y les dio la orden de alto.
Según lo expresado por el efectivo que estaba vestido de civil por estar de franco, uno de los delincuentes sacó un arma mientras que el otro le gritaba que le dispare porque era un “rati”. Lencina abrió fuego y realizó 14 disparos. Los motochorros recibieron al menos dos proyectiles cada uno e intentaron huir en la moto, pero cayeron sin vida a los pocos metros.
En la zona se encontraba Lucas Fernando Delgado (21) realizando tareas de recuperación luego de haber hecho ejercicio junto a sus hermanos. Un proyectil le impactó en el pecho y cayó al suelo. Lo trasladaron al hospital Padilla donde ingresó sin vida.
El fiscal Carlos Sale junto a personal policial y del ECIF comenzaron a realizar el análisis de la escena de los hechos. El primer dato de importancia que obtuvieron es que confirmaron que el arma que utilizaron los jóvenes era de juguete. También establecieron que Lencina, que presta servicios en la comisaría de Villa Carmela, realizó 14 disparos.
Además, identificaron a los jóvenes fallecidos como José Alberto Gallardo (23) y Cristian Legname (29). Fuentes policiales confirmaron que ambos tendrían antecedentes por robo.
La situación procesal del efectivo se definirá en las próximas horas. Será clave la declaración de los hermanos de Delgado que, por cuestiones humanitarias, los pesquisas decidieron no entrevistarlos por el momento que habían vivido. De todas maneras, el fiscal sumó testimonios que respaldan la versión del aprehendido.
El hecho de que los “motochorros” hayan portado un arma de juguete no complica procesalmente a Lencina. “En ese momento no puede saber si se trataba de una réplica y mucho menos si uno de los fallecidos arengaba a que le dispararan”, explicó una fuente judicial. Además, se confirmó que el policía tenía una pistola Jericho, cuyo cargador tiene capacidad para cargar 17 cartuchos.